En duros térmicos, pero con la ironía que la caracteriza, la líder la Coalición Cívica apuntó contra el Congreso y las legisladoras actuales.
Elisa Carrió sin ningún tipo de filtro dijo que las diputadas de La Libertad Avanza son gatos y lanzó una señal de advertencia: “nos invadieron”.
“Antes eran gatos, acompañantes; después fueron asesoras, y ahora están sentadas en las bancas”, sentenció la exlegisladora. La líder de la Coalición Cívica contó que había escuchado hablar de los “gatos”, pero que hasta que ingresó al Congreso nunca había visto a uno. “Yo quería ver cómo era un gato, porque decían que eran lindas”, lanzó.
“¿Yo no digo que no estén porque uno puede educarse, no?, pero bueno, por lo menos que se formen… Esa es la impresión que tengo hoy, los gatos nos invadieron”, reflexionó sobre algunos de los miembros de la cámara baja.
Mientras prepara su candidatura como senadora en la Capital, Carrió criticó a Milei y apuntó contra las diputadas. Si bien no hizo énfasis en ningún bloque, cerca de Lilita dijeron que era “bastante obvio” de quienes hablaban.
“Ahora veo gatos sentados… O sea, no tengo ningún problema, porque antes eran gatos, acompañantes; después fueron asesoras, y ahora están sentadas en las bancas”, expresó Carrió en un streaming con Rosendo Grobo, hijo del sojero Gustavo Gobocopatel.
La comparación zoológica de Lilita choca con las calificaciones de Milei, que se refirió en más de una ocasión a los diputados como ratas. Javier Milei destacó la “labor patriótica” de los diputados que apoyaron su veto a la movilidad jubilatoria
La Oficina del Presidente emitió este miércoles un comunicado en agradecimiento a los “87 diputados nacionales que impidieron a un grupo de irrersponsables adoptar medidas populistas que habrían quebrado las arcas públicas” al votar en contra del rechazo al veto de Javier Milei a la Ley de Movilidad Jubilatoria.
Mientras las fuerzas de seguridad avanzaban sobre manifestantes afuera del edificio del Congreso, desde el Ejecutivo haciendo alusión a un adversario invisible, y con la evidente seguridad de contar con los votos propios y ajenos para cada debate legislativo.