Hace diez años que María Cecilia López se especializa en bioquímica regenerativa, un campo de recursos que ayudan al cuerpo a sanar y mantenerse saludable. Se utilizan células propias del organismo (plaquetas y plasma de la sangre) para reparar, reponer o regenerar tejidos.
“Es una corriente holística que hace más de 10 años se instaló a nivel mundial a partir de que ya hemos logrado vivir más tiempo, entonces ahora necesitamos tratar de vivir mejor”, explica. EN EL CHACO
Con la edad los tejidos empiezan a morir como parte de un proceso natural. “Entonces si buscamos devolverle la potencialidad que tenían podemos lograrlo con el plasma y las plaquetas que forman parte de las terapias regenerativas”, describe.
En la provincia López comenzó a aplicar la técnica en pacientes con problemas articulares, así como también en estética. Más recientemente empezó a utilizarla en ginecología, tanto para regeneración de la parte vulvar y endometrio, como también en fertilidad.
DEVOLVER FUNCIONALIDAD
“Utilizamos células y fluidos propios del paciente para poder inyectarlos en tejidos, en este caso, por ejemplo, la parte ginecológica para devolverle a esos tejidos la funcionalidad que perdieron”, indicó.
“La sequedad vaginal o el aspecto de deterioro que tenían los órganos sexuales femeninos secundarios, como la vagina, la uretra y el cuello del útero, mejoraron muchísimo con estos tratamientos”.
Las prácticas son elegidas por personas que no quieren abordar sus cambios desde una terapia hormonal o desde otro tipo de terapias. “Esta terapia encuentra una solución donde antes no había, porque esas pacientes se quedaban sin nada y realmente no solo que retoma o recluta las células que existen alrededor de los órganos, sino que les devuelve funcionalidad”, afirma.