El crítico presente del Xeneize empujó al presidente a reestructurar el club.
BOCA vive horas turbulentas tras el complicado presente futbolístico que lo sacó del Mundial de Clubes, la Copa Argentina y lo tiene sin ganar en el Torneo Clausura.
En este contexto, Juan Román Riquelme quedó contra la espada y la pared y pareciera obligado a tomar decisiones que calmen el nerviosismo de los hinchas.
El presidente del Xeneize podría desarmar el Consejo de Fútbol, la estructura que estuvo a su alrededor desde un principio.
Marcelo Delgado es el único que podría continuar, caso contrario a Mauricio Serna y Raúl Cascini, quienes darían un paso al costado, según adelantó Hugo Balassone en Radio La Red. El primero que hace tiempo se corrió de sus tareas fue el Patrón Bermúdez, que argumentó razones familiares para quedarse en Colombia.
Riquelme busca rodearse de una mejor manera para lo que viene, por lo que seguramente apostará por cambios en la estructura futbolística del club de la Ribera.
Miguel Ángel Russo podría dejarle el armado del equipo a Claudio Úbeda y quedarse con una figura similar a la de un mánager.
Carlos Fernando Navarro Montoya fue otro de los nombres que surgió en las últimas horas para sumarse a la estructura del fútbol. El Mono está sin trabajo tras su salida como entrenador de Santamarina de Tandil.