El secretario general de la UTA Chaco, Raúl Abraham, confirmó en Radio Libertad que la empresa de transporte ERSA notificó la reducción de personal en el marco del procedimiento preventivo de crisis. Desde el gremio se oponen a la medida y advierten que podría afectar a más de 50 trabajadores.
La empresa ERSA Urbano S.A., prestataria del servicio de transporte público en Resistencia, notificó oficialmente a la Unión Tranviarios Automotor (UTA) Chaco su decisión de reducir la nómina de personal debido a la crítica situación económica que atraviesa el sector. La comunicación, ingresada bajo el expediente E3-2025-47669-AE en la Dirección de Trabajo, encendió las alarmas en el gremio. Ver más
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“Recibimos una nota el 28 de octubre donde la empresa comunica que, a partir del 3, realizarían una reducción de personal”, explicó Raúl Abraham. Según precisó, la medida se enmarca en el Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC), que permite suspensiones con el pago del 50% del salario, algo que para el sindicalista “no alcanza ni para la mitad del mes”.
Abraham estimó que, sobre una planta de unos 260 trabajadores, entre 50 y 55 podrían verse afectados. “No vamos a aceptar esto. No siempre la variable de ajuste tiene que ser el trabajador. Hoy el salario no alcanza y encima quieren recortar a la mitad. Es imposible sostener un hogar así”, expresó con preocupación.
Desde el gremio afirmaron que la UTA se mantendrá firme y agotará todas las vías legales para evitar despidos o suspensiones. “Los compañeros están decididos a pelear hasta el final. Esto no solo golpea al trabajador, sino también a su familia. No vamos a permitir que sigan perdiendo derechos conseguidos con años de esfuerzo”, enfatizó.
“El problema empezó con la quita del Fondo Compensador”
Abraham recordó que la crisis del transporte se profundizó con la eliminación del Fondo Compensador, un subsidio nacional que dejó de aplicarse en 2024. “A partir de ahí, todo fue cuesta abajo. La provincia cambió la modalidad de entrega de fondos y los aportes ya no se calculan por trabajador, sino por uso del servicio. Pero si la gente no puede pagar el pasaje, el sistema se derrumba”, explicó.
El dirigente señaló que el incremento del boleto —de $750 a $1.300— agravó la situación: “La gente no viaja porque no tiene trabajo o gana sueldos por debajo de la línea de pobreza. El sistema está castigando a todos: trabajadores y usuarios”.
“El Gobierno debe intervenir”
El titular de la UTA Chaco cuestionó la falta de respuesta de las autoridades. “Hasta ahora no hubo intervención ni del Ministerio de Trabajo de la Nación ni de la Dirección Provincial. Deberían actuar para equilibrar las partes y buscar una salida, porque el problema afecta a toda la comunidad”, afirmó.
ERSA, por su parte, ya había advertido al Gobierno provincial que de no revertirse la situación podría dejar de prestar el servicio en diciembre. “Ellos dicen que no pueden seguir operando si no reciben los subsidios adeudados. Y como cualquier empresa, si no tiene rentabilidad, levanta todo y se va. Pero los que quedan en la calle son los trabajadores”, lamentó Abraham.