Por primera vez en cuatro años, la ANSeS reveló cuánto cobra Cristina Kirchner por sus dos jubilaciones de privilegio. En enero recibió $ 14.548.836 en bruto, según una respuesta del gobierno de Javier Milei ante un pedido de acceso a la información pública de Clarín. El organismo le pagó $ 8.107.506,01 por su pensión no contributiva como ex presidenta y $ 6.441.330 por la pensión de su ex esposo y ex presidente Néstor Kirchner.
Esa cifra no incluye deducciones ni suplementos. No se sabe, por ejemplo, si cobra antigüedad, compensación jerárquica y un “adicional por zona austral (40 por ciento del haber real)” por tener residencia en El Calafate que le había otorgado un juez ante su reclamo.
En diciembre, las jubilaciones mínimas, con el reajuste, quedaron en $ 105.713. Es decir, que Cristina cobró el equivalente a 142 jubilaciones mínimas, sin tener en cuenta los bonos extras que la ANSeS pagó a los jubilados.
La ex titular de la ANSeS y referente de La Cámpora Fernanda Raverta se había negado a dar esa información jubilatoria, aduciendo que se trataban de datos vinculados a la privacidad de la ex presidenta; pero ahora el organismo accedió a dar la información porque cambió el criterio y sostuvo que se trata de una ex funcionaria y de fondos públicos.
Por el escándalo que generó el cobro de esas jubilaciones de parte de la ex presidenta, el presidente Javier Milei anunció el viernes ante la Asamblea Legislativa que enviará un proyecto de ley al Congreso para derogar esa ley 24.018 que impulsó el ex presidente Carlos Menem.
El ex presidente Alberto Fernández pidió en enero, acogerse a esta pensión graciable y podría reclamar derechos adquiridos antes de que la ley eventualmente sea anulada. La pensión equivale al sueldo de un ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Más de 90 millones el año pasado
Durante el 2023, la ex vicepresidente cobró $ 93.622.678 en total, según la respuesta oficial del organismo. Esto se divide en $ 41.448.119 por su pensión. Y gracias a su jubilación, otros $ 52.174.559.
Mes a mes las jubilaciones de la ex vicepresidente se fueron incrementando notoriamente. En enero de 2023 ambas asignaciones mensuales sumaban $ 4.953.442. Dentro de esos casi 5 millones había $ 2.760.628,81 pertenecientes a su jubilación y $ 2.192.813 pertenecientes a su pensión.
En febrero, marzo y abril las asignaciones sumaron exactamente $ 5.943.270. De los cuales $ 2.631.075 eran correspondientes a la pensión y $ 3.312.194 se debían a su jubilación.
En mayo, junio y julio las atribuciones de privilegio fueron de $ 3.962.758 en el caso de las jubilaciones, y $ 3.148.000 en el caso de las pensiones. Esto da un total de $ 7.110.759.
En agosto, septiembre y octubre, sus pensiones fueron de $ 4.076.309 y sus jubilaciones fueron de $ 5.131.061. Sumadas dan específicamente $ 9.207.370.
En noviembre la pensión fue de $ 4.341.172 y su jubilación fue de $ 5.464.398. Esto da exactamente $ 9.805.570. Por último, en diciembre la pensión fue de $ 5.347.976 y su jubilación fue de $ 6.731.489. Lo que da una sumatoria de $ 12.079.465.
Monto “exorbitante” y dudas con la declaración jurada
El abogado especialista en jubilaciones Federico Despoulis analizó el caso de Cristina y dijo que “el sistema previsional tiene un principio básico que es el de solidaridad, que además es intergeneracional”. “Hoy un haber máximo está en un tope de $ 904.000 y cualquiera puede comparar esa cifra con la jubilación de privilegio de Cristina para darse cuenta de lo exorbitante del monto”, agregó.
“Esta razón genera una gran desigualdad entre un jubilado con 30 años de aportes y, por ejemplo, la ex presidenta que con 8 años como presidente cobra un monto excepcional”, destacó Despoulis.
“Cristina llegó a cobrar esas dos jubilaciones de privilegio para haber litigado contra el Estado en un hecho inédito y único con la complicidad de la ANSES”, agregó.
Para Despoulis, “en este momento en que los jubilados están pasando por momento de desgaste y devaluación de sus haberes, Cristina cobra la jubilación de una gran monarca, cuyos privilegios están por encima de las personas y las leyes”.
Por su parte, el titular de Contadores Forenses, Alfredo Popritkin, analizó los ingresos que la ex presidenta declaró en su declaración jurada de bienes del año pasado presentada ante la Oficina Anticorrupción.
“Durante el año 2023 la ex vicepresidenta declara un total de ingresos en concepto de renta del trabajo personal por la suma de $ 97.727.008 lo representa un valor promedio mensual de $ 7.517.462, teniendo en cuenta que ha percibido 12 salarios y dos cuotas de sueldo anual complementario”.
En la declaración jurada “no surge que haya percibido dinero de alquileres” ya que sus tres hoteles y propiedades están embargadas por la Justicia en la causa Vialidad.
En cuanto a los intereses por plazos fijos, el ex perito de la Corte explicó que “si bien ha tenido a enero de 2023 la suma de $ 55 millones en depósitos a plazo fijo, de la declaración jurada no surgen en forma discriminada los intereses percibidos por ese concepto. Es posible que este concepto se encuentre contenido en otra partida global”.
Sobre la inversión de Cristina en acciones, el contador dijo que “la ex presidenta desarmó sus plazos fijos y se posicionó en activos de empresas extranjeras”. Por ejemplo, compró acciones de Coca Cola, el índice Nasdaq de las tecnológicas de Estados Unidos, Microsoft, Apple, Visa, Vista Energy, Berkshire Hathaway, Donat Investments (empresa india), Bioceres Crop Solutions Corp y Mercado Libre”. De estas son solo argentinas las últimas.
“Teniendo dictada una medida cautelar junto a la sentencia de la causa Vialidad, una forma de dificultar la posibilidad de incautarle los depósitos a plazo fijo por 55 millones de pesos que poseía al finalizar el año 2022, es invertir en acciones de empresa del exterior para el caso que la sentencia quede firme”, advirtió Popritkin.
Pensiones en tiempo récord
Las dos pensiones graciables habían sido otorgadas a Cristina en el 2015 en tiempo récord por la entonces ministra de Desarrollo Social y su cuñada Alicia Kirchner con el aval de su “cerebro” judicial y secretario Legal y Técnico de entonces, Carlos Zannini. Pero un año después, la sucesora de Alicia Kirchner, Carolina Stanley, derogó el doble beneficio y tras un extenso análisis se resolvió que debía optar por uno, como dice la ley.
Entonces, Cristina fue a la Justicia y abrió un largo y polémico proceso. En 2020, el juez subrogante Ezequiel Pérez Nami anuló esa resolución de Stanley y concedió los dos beneficios. Dijo que “de estar percibiendo en forma pacífica ambos beneficios, implica una modificación ilegal que vulnera derechos firmes y consentidos en cabeza de la titular”. Es decir que se violaron los “derechos adquiridos” de Cristina en cuanto a las dos pensiones.
Dijo el juez que “concluyo en forma categórica que en casos como el presente en estudio, la incompatibilidad establecida en el art. 5º, ley 24.018 solo alcanza a sus beneficiarios en grado de Titulares de los mismos y no se extiende a sus derechohabientes, por lo que no existen inconvenientes de orden legal para que se perciban ambos beneficios al mismo tiempo”.
En otras palabras, un cónyuge puede cobrar le pensión graciable de otro. El fiscal Gabriel De Vedia no apeló la medida y Raverta dejó que el fallo llegara a la Cámara de la Seguridad Social y quedara firme. Solo existe un recurso de la diputada Graciela Ocaña ante la Corte para que se le de el status de querellante y tratar de dar vuelo del polémico fallo.