La recién nacida pesó 2,900 kg y tanto ella como su madre continúan en observación, aunque se encuentran fuera de peligro.
En la mañana de este viernes, el sistema de emergencias fue alertado sobre una joven de 19 años que se encontraba en trabajo de parto en su domicilio. E.P.S. esperaba a su primer hijo y fue asistida de inmediato por personal policial. El oficial a cargo, junto con el agente Antonio Fernández, se desplazó rápidamente al lugar.Al llegar, comprobaron que la mujer había comenzado el parto y la situación requería atención urgente. Ante la demora de la ambulancia y a pedido de los familiares, los agentes decidieron trasladarla al Hospital Fleitas en Fontana. Con el cordón umbilical ya cortado, la joven madre, su recién nacida y su madre fueron llevadas en el móvil policial hacia el nosocomio local.
En el trayecto, la bebé presentó signos de ahogo, lo que obligó a los oficiales a realizar maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) mientras circulaban por Avenida Marconi. Afortunadamente, la rápida acción de los policías permitió que la pequeña reaccionara.
Al llegar al Hospital Fleitas, E. y su hija fueron recibidas por los médicos y tras ser estabilizadas, se confirmó que ambas estaban en buen estado de salud. Posteriormente, madre e hija fueron derivadas al Hospital Julio C. Perrando para realizar estudios de rutina.
La recién nacida pesó 2,900 kg y tanto ella como su madre continúan en observación, aunque se encuentran fuera de peligro. La intervención policial y su pronta acción fueron claves para salvar la vida de la bebé.