Huracán y Platense protagonizarán este sábado uno de los choques por los cuartos de final de la Copa de la Liga con dos entrenadores que están en la mira Xeneize.
HURACÁN Y PLATENSE llevarán adelante un interesante duelo por los cuartos de final de la Copa de la Liga este sábado en el Estadio San Juan del Bicentenario y transitan un final de temporada muy alejado al que imaginaban.
Diego Martínez llegó al Globo con la misión de salvar del descenso a un equipo muy amenazado. De hecho, casi todo su paso por el actual certamen se dio con la calculadora en la mano y el sufrimiento a flor de piel por un objetivo que recién se concretó en la anteúltima jornada de la fase regular con el triunfo ante Arsenal.
“Costó muchísimo pero se logró el primer objetivo de dejar a Huracán en primera división y ahora hay que ir por el otro: avanzar a la fase final”, expresó Martínez tras la victoria, meta que cumplió en la última jornada con el 2-0 ante Atlético Tucumán de visitante y la obtención del primer puesto en la Zona A. Por su parte, Martín Palermo, que también navegó aguas de incertidumbre en algún momento de la Copa de la Liga, encontró la regularidad en el último tramo y se metió entre los 4 clasificados para darle al Calamar la chance de soñar en grande en lugar de penar con las cuentas para saber si podía mantener la categoría. Una vez consumado el éxito con Sarmiento de Junín, el Titán fue muy sincero: “El presidente de Platense ya sabe de mi deseo de ser el próximo DT de Boca. Estamos en una situación de expectativa, en la que esperaremos que se abra la posibilidad”, sostuvo, a sabiendas de que si la dupla Andrés Ibarra-Mauricio Macri se imponen en las por ahora postergadas elecciones en Boca, se hará realidad su pretención.
Martínez también sonó en el radar Xeneize, pero por el lado de la lista del oficialismo que encabeza Juan Román Riquelme como postulante a presidente. El ídolo boquense fue consultado por tal posibilidad y fue escueto: “El de Huracán, lo ha hecho bien, a mí hay un montón entrenadores que me gustan”. E intentó bajar la ansiedad al afirmar que “el técnico que vamos a intentar traer es porque estamos convencidos y seguros de que nos va a ayudar”.
El propio DT manifestó que “esta situación de los rumores con Boca ya me sucedió cuando estuve en Tigre. Mi representante sabe que no me tiene que decir nada. A mí no me llama nadie ni tiene que llamarme nadie”.
Los presidentes de Platense y Huracán también jugaron su rol en la situación de sus conductores de cara al futuro. Sebastián Ordóñez, titular de la entidad de Vicente López, señaló que “sé que tiene amor por Boca, por Estudiantes, como hoy lo tiene por Platense. Martín expresó lo que siente pero la cabeza está en el partido de mañana. Él sabe muy bien que la prioridad para nosotros como institución es su continuidad”.
A su vez, la máxima autoridad del club de Parque Patricios, David Garzón, expresó sobre Martínez: “Diego tiene contrato con Huracán hasta junio de 2024. Estamos planificando la pretemporada y una gira de partidos. Está enfocado acá y lo vamos a tratar de encadenar”.
Lo cierto es que más allá de su chance en la continuidad de un torneo que primero los vio luchando por no descender y ahora los encuentra soñando por dar la vuelta olímpica, Diego Martínez y Martín Palermo tienen el escudo de Boca flotando en el horizonte.El primero, sin soltar prenda de si le gustaría llegar a ese sitial y el segundo con la firme convicción de que el resultado eleccionario boquense podría ser el pasaporte a la concreción de su mayor anhelo.