Cuatro gobernadores, entre ellos el mandatario provincial Leandro Zdero, y los titulares de bloque en ambas cámaras mostraron otro tono después de que el presidente del partido votara contra el megadecreto de Javier Milei
Luego de que el presidente de la Unión Cívica Radical (UCR), Martín Lousteau, votara en contra del DNU 70 que se trató el jueves en el Senado y fue rechazado por 42 votos contra 25, un grupo de líderes del partido -cuatro gobernadores y los titulares de bloque del espacio en ambas cámaras- firmaron un comunicado aparte en el que se despegaron de esa decisión. Ahí dijeron que apoyan la idea de impulsar nuevas reformas en el Gobierno, aunque repararon en que la gestión de Javier Milei debe llamar al consenso y abandonar el tono de la campaña electoral.
La carta que lleva el sello partidario está firmada por cuatro de los cinco gobernadores radicales: Gustavo Valdés, de Corrientes; Alfredo Cornejo, de Mendoza; Carlos Sadir, de Jujuy; y Leandro Zdero, de Chaco. No lo rubricó el santafesino Maximiliano Pullaro. Sí se sumaron los presidentes de bloque en el Senado y Diputados, Eduardo Vischi y Rodrigo de Loredo.
Bajo el título Queremos un cambio en el país y una UCR moderna, los dirigentes introdujeron que la Argentina necesita “acuerdos y consensos” que permitan sacar al país del “estancamiento y la decadencia” que le achacaron al kirchnerismo. “Respetamos el camino que eligieron los argentinos en las elecciones del año pasado con un claro mandato de cambio y vamos a contribuir con las herramientas justas y necesarias que el gobierno necesita para avanzar en su plan de gestión”, sentenciaron, luego de que el presidente del partido ayer considerara que el megadecreto de la gestión mileísta era “inconstitucional” y votara en contra.
“Queremos un cambio en el país y trabajamos para construir un partido moderno, que acompañe las reformas estructurales que necesita hoy la Argentina. Apoyamos el orden de las cuentas públicas para salir de esta debacle y avalamos que esté en el orden de prioridades del Estado nacional la discusión de avanzar para que haya equilibrio fiscal y no vivir con déficit fiscal como ha pasado en los últimos 65 años, lo que achata cada vez más nuestras posibilidades de crecimiento como país”, indicaron además los popes radicales.
En este comunicado que llega también después de expresiones conjuntas que se emitieron la semana pasada desde la presidencia partidaria y desde la Convención Radical, a cargo de Gastón Manes, con lineamientos que anticipaban la postura de un sector más alejado de la Casa Rosada, los más cercanos a Milei dijeron: “Apoyamos la discusión y el impulso de reformas necesarias en el gobierno nacional para sacar a flote a nuestra sociedad, ahogada con la inflación, la presión impositiva y la pobreza a la que nos fue sometiendo el kirchnerismo con un modelo negacionista, discriminador y corrupto”.
No obstante, señalaron que esas reformas deben ser “fruto del consenso” y que por ese motivo “el Ejecutivo no debe tentarse con prolongar la narrativa electoral”.
Convencidos de que se precisan “cambios profundos”, los cuatro gobernadores y los dos legisladores se comprometieron a “contribuir con acciones conducentes” para lograr acuerdos y cerraron: “Queremos un cambio cultural, que promueva un Estado inteligente, eficaz y simplificado, que se enfoque en las principales tareas como seguridad, educación, salud, defensa y justicia”.
En la sesión de ayer, a Lousteau se sumó Pablo Blanco, los únicos dos senadores de la UCR que rechazaron el megadecreto. Maximiliano Abad se abstuvo. Asimismo votó contra la iniciativa Edith Terenzi, de Chubut, que pese a ser radical integra otro bloque: Cambio Federal.
Esto genera una división fuerte dentro del partido, que asimismo se vio reflejada en la sesión especial por el proyecto que buscaba modificar la fórmula jubilatoria esta semana en Diputados y que iba contra las intenciones del Gobierno. Mientras que la mayor parte del bloque en la Cámara baja, que responde a De Loredo, no bajó al recinto, cinco diputados ligados a Facundo Manes colaboraron para alcanzar el quórum. Finalmente los legisladores de Hacemos Coalición Federal, que impulsaban la iniciativa, no lograron conseguir el número para tratarla.