La ugandesa de 33 años había sido internada cuatro días atrás con el 80% de su cuerpo quemado. El atacante se encuentra en una clínica médica, ya que también sufrió quemaduras
El mundo del deporte vive horas de profundo dolor tras conocerse la noticia de la muerte de la atleta ugandesa Rebecca Cheptegei. La corredora se encontraba internada en el hospital de Kenia en el que ingresó después de sufrir un brutal ataque de su novio, quien según los primeros informes la habría rociado con gasolina para luego prenderla fuego. El salvaje crimen ha dejado conmocionada a la comunidad deportiva internacional.Rebecca Cheptegei, de 33 años, había sido trasladada de urgencia al Hospital Universitario y de Referencia Moi de Eldoret, en el oeste de Kenia, con quemaduras en el 80% de su cuerpo. Pese a los esfuerzos médicos, falleció en las últimas horas. “Desafortunadamente, la perdimos después de que todos sus órganos fallaran la pasada noche”, afirmó el doctor Owen Menach, director interino del hospital, citado por medios locales. La Federación de Atletismo de Uganda (UAF, por sus siglas en inglés) también confirmó la muerte de la deportista y expresó su dolor en un comunicado en redes sociales. “Nos entristece profundamente anunciar el fallecimiento de nuestra atleta Rebecca Cheptegei esta mañana temprano, quien trágicamente fue víctima de violencia doméstica. Como federación, condenamos tales actos y pedimos justicia. Que su alma descanse en paz”, señaló la UAF en su cuenta de la red social X. El suceso ocurrió el pasado domingo en el condado keniano de Trans Nzoia, donde la atleta fue atacada por Dickson Ndiema Marangach, su novio, quien también sufrió quemaduras en el 30% de su cuerpo y se encuentra ingresado en el mismo hospital de Eldoret. La Policía informó que el femicida se coló en la casa de Cheptegei con un bidón de cinco litros lleno de gasolina. Cheptegei había ido a la iglesia con sus hijos y, al regresar, el hombre le arrojó el combustible y le prendió fuego.
Su novio quedó internado con el 30% de su cuerpo quemado (Reuters)
Los padres de la corredora, Joseph Cheptegei y Agnes Ndiema, indicaron que su hija, residente en Uganda, había comprado un terreno en el condado keniano y había construido una casa donde se alojaba durante sus entrenamientos. Esta vivienda, que debía ser un lugar de descanso y preparación, se convirtió tristemente en el escenario de este brutal ataque. Cheptegei falleció después de que el gobierno de Kenia anunciara planes para trasladarla a Nairobi con el fin de que recibiera tratamiento médico especializado, dadas las graves condiciones en las que se encontraba. “Se están haciendo esfuerzos para garantizar que la atleta ingresada en Eldoret sea trasladada en avión a Nairobi para recibir tratamiento especializado tras el desafortunado incidente”, había asegurado el secretario de Estado de Deporte de Kenia, Peter Tum, antes de la lamentable noticia.
La atleta ugandesa inició su carrera profesional en 2010 y participó en numerosas competiciones internacionales. Su aparición más reciente fue en la prueba femenina de maratón en los pasados Juegos Olímpicos de París, donde acabó en 44ª posición. Su repentino fallecimiento ha provocado una ola de consternación y llamados a la justicia.
El dolor por la pérdida de Rebecca Cheptegei trasciende las fronteras de Uganda y Kenia, impactando a la comunidad atlética internacional y a todos aquellos que siguen con pasión este deporte. Las autoridades locales y diversas organizaciones han expresado su condena hacia el acto de violencia y han instado a que se imparta justicia rigurosa en este caso.