En medio de su viaje, Alejo Ciganotto fue sorprendido por el entrenador de la Academia, que se enteró de su historia y se emocionó con su fanatismo.
Alejo Ciganotto salió de su casa en San Martín con un único objetivo: llegar a Paraguay para ver la final de la Copa Sudamericana, en donde su querido Racing se enfrentará a Cruzeiro. Su travesía no solo presentaba el desafío de viajar hasta Asunción a dedo, sino también el de conseguir una entrada para la final, algo que no había logrado hasta hace unas horas. Y es que, enterado de su historia, el propio Gustavo Costas le envió una serie de audios al WhatsApp en donde le confirmó que le había conseguido un lugar para la final. La emoción de Alejo tan grande que decidió compartir parte del mensaje del DT de la Academia en sus redes sociales.
“No me tenés que agradecer nada. A vos te tengo que agradecer por seguir a Racing así”, le dijo Costas al joven que emprendió travesías increíbles a lo largo de todo el torneo continental para poder seguir al club de sus amores.
La historia de Alejo Ciganotto, el hincha de Racing que se fue caminando a Chile, Brasil y Paraguay
Alejo Ciganotto emprendió travesías insólitas para ver a Racing en octavos de final, en cuartos y en semis: viajó a Chile y dos veces a Brasil caminando y haciendo dedo. Ahora, a falta de una semana para la final, llegó a Asunción con su ilusión como motivación.
En diálogo con TN, Alejo detalló los inconvenientes que se le presentaron y relató cómo es viajar a pie por pasión. “Fue todo herencia familiar: mi abuelo es enfermo de Racing, mi viejo lo mismo y yo también”, contó.
Este sentimiento por la Academia lo acompaña desde antes de su nacimiento y una tierna anécdota lo grafica bien: “Yo tengo tatuado mi año de nacimiento, que es el 2002. Racing salió campeón en 2001 y mientras yo estaba en la panza de mi mamá, mi viejo hizo firmar una camiseta chiquita por todos los jugadores de ese plantel, que la tengo todavía guardada”. Motivado por esta situación, Alejo tuvo una idea descabellada que lo volvió viral y le permitió acompañar al equipo en momentos clave: decidió viajar a dedo a Chile para el partido ante Huachipato por los octavos de final.
“La primera vez surgió de la nada. Yo estaba aburrido en mi casa, Racing jugaba en una semana en Chile y dije ‘¿y si me voy caminando y haciendo dedo?’, y me mandé”, recordó con una sonrisa y mucha alegría.
Por delante tenía un camino largo, que nunca había hecho y que le presentaba muchos interrogantes. “Yo salí prácticamente sin plata. Calculé que llegaba a Chile, pero no llegué, ja. Cuando estaba en Mendoza me quedaban mil pesos nada más”, agregó.
Con su celular en mano comentó su situación en X (ex-Twitter) y recibió la ayuda de muchos otros fanáticos de la Academia para llegar a su destino: “Ahí me hice viral y la gente de Racing me empezó a ayudar. Pude llegar a Santiago y de ahí a Viña del Mar. Un hincha de Racing fue el que me hospedó en Santiago, justamente, y conseguí una entrada”.
Después de esa primera travesía exitosa y con un triunfo 2-0 en cancha, Alejo le tomó el gusto y recibió un apodo impensado en redes sociales: “Me pusieron ‘el talismán’ y ‘el amuleto’. Al siguiente partido me decían ‘tenes que ir, tenes que ir’, ja”.
Ante este pedido, repitió esta locura de seguir a Racing y el siguiente destino fue Curitiba, Brasil, en los cuartos de final ante Athletico Paranense. Tras un nuevo éxito, viajó a San Pablo por la semifinal contra Corinthians, pero allí sufrió un inconveniente que casi lo deja afuera del viaje a Paraguay.
“En San Pablo llovió muchísimo, entramos con el partido ya empezado, me guardé el celular en el bolsillo y cuando terminó el primer tiempo lo revisé y no andaba. Se me mojó todo y no prendía. Cuando volví a Buenos Aires lo llevé a dos técnicos y me dijeron que no tenía arreglo”, contó.
Con la ilusión golpeada, desistió de emprender un nuevo viaje. “Al no tener celular no iba a ir (a Paraguay). Yo podía salir, pero el tema es que no me puedo estar comunicando, seguramente iba a terminar a la deriva y no tenía ganas de pasar situaciones feas. Un técnico me lo quiso arreglar, pero a los días me dijo que no se podía. Entonces ahí puse en Twitter que no viajaba y la gente de Racing empezaron a decir ‘andá igual’. Por suerte un amigo me prestó un celular, empecé a tirar mensajes por todos lados y me fui”, relató.
A diferencia de partidos anteriores, la urgencia del viaje fue mayor y Alejo emprendió camino con una complicación extra: “Yo me vine sin entrada, sin nada, con poca plata, un celular que no es mío. Un desastre. Un enfermo por Racing, ja”. Sin embargo el destino quiso que esté en la Nueva Olla y, gracias al DT de su equipo, alentará desde la tribuna.
Alejo Ciganotto emprendió viaje a dedo a Paraguay para estar presente en la final de la final de la Copa Sudamericana con Racing. (Video: alejo.ciganotto/IG)
Racing vs. Cruzeiro por la final de la Copa Sudamericana 2024: día, hora y dónde ver
La Academia enfrentará al Cruzeiro por la final de la Copa Sudamericana 2024 el sábado 23 de noviembre a las 17 (hora de Argentina) en el estadio La Nueva Olla, Asunción. El partido podrá verse a través de las pantallas de ESPN y DSports.