En la Argentina se inscriben alrededor de 28.000 planes de ahorro mensuales para la compra de un auto cero kilómetro. La cifra dada a conocer por la Asociación de Concesionarios de Automotores (ACARA) representa cerca de un tercio de los patentamientos anuales. Y sobre todo, demuestra la vigencia de un sistema que en muchos países no existe, pero aquí se mantiene vigente luego de su surgimiento en la década del ’70.
Los datos dejan en claro la apuesta de gran cantidad de personas por esta modalidad de compra. Se entiende: tal como se presentan en los concesionarios, los planes de ahorro logran que el desafío de comprar un vehículo cero kilómetro parezca sencillo. Pero no lo es. Este esquema tiene características que no son siempre advertidas por los vendedores y, en ciertos momentos, pueden dejar al ahorrista frente a un escenario complicado.
Un detalle, en principio, para prestarle mucha atención. “Todas las cuotas son variables”. Así lo explica Emanuel Sabatinelli, de Francisco Osvaldo Díaz, concesionario oficial de Renault en Villa Ortúzar. “Existen algunos planes donde las terminales hablan de cuotas fijas durante un año, pero tienen una cláusula. Por ejemplo, si el auto no aumenta más del 20%. Con el ritmo inflacionario del país, eso se logra en pocos meses y la cuota pasa a ser variable”, señala el especialista ante una consulta de Popular.
A través de este esquema, vale recordar, un grupo preestablecido de personas realiza un aporte mensual que alcanza para la compra de dos vehículos cero kilómetro que son sorteados o licitados entre los participantes. Cuando un ahorrista recibe su auto, éste queda prendado y para conservarlo deberá seguir pagando hasta el final. “Antes los planes eran de 84 cuotas, pero ahora pasaron a ser de 120”, cuenta Sabatinelli.
En la actualidad, la cuota promedio para un plan base de un auto a estrenar se ubica en alrededor de 50.000 pesos, según comentaron fuentes del sector a Popular. El detalle, como se dijo, es que cada mes se recalcula dividiendo por 120 el valor actualizado del 0 km, más otros cargos del plan. De esta manera, el valor puede parecer accesible para el ahorrista al inicio, aunque no debe perder de vista que se ajustará mes a mes.
Planes de ahorro: los puntos a prestar atención
Los gastos extra son otro punto a tener en cuenta. Más allá de la cuota del plan, aparece una larga serie de cargos que pueden elevar la suma más de un 30%, entre ellos ítems administrativos, el seguro de vida, el seguro del auto (a partir de la entrega), sellos, tasas y otros impuestos. Y los costos de mantenimiento deberán pagarse por separado una vez recibida la unidad.
Con el aumento de las cuotas, miles de ahorristas quedan en una situación económica complicada y no pueden continuar con el pago del plan. “En esos casos, hay que diferenciar entre quienes recibieron el auto por sorteo o licitación, y aquellos que aún no tienen el vehículo”, dice Adrián Bengolea, presidente de la asociación Usuarios y Consumidores Unidos (UCU), en diálogo con Popular.
“La gente que no cuenta con el auto no es deudora. Básicamente, es un plan de ahorro en el que se aconseja comunicar vía carta documento que va a dejar de pagarse por imposibilidad y se abona una multa menor. En cambio, los que tienen el auto y no pueden seguir pagando sí son deudores. Les pueden secuestrar la unidad y rematársela”, detalla el abogado. Y agrega: “Las empresas reclaman la deuda al valor del auto al momento del pago con una doble actualización que duplica la deuda, lo que es ilegal”.
¿Otros aspectos que pueden complicar el camino hacia el cero kilómetro? El modelo del vehículo puede cambiar en cualquier momento del plan, las entregas sufren demoras ante las trabas para importar y, cuando el auto finalmente se entrega, el seguro suele ser elegido por la empresa, lo que a menudo no resulta el mejor, ni el más conveniente para quien lo paga.
“El sistema de los planes de ahorro merece una revisión general, con las asociaciones de defensa del consumidor, el Gobierno y las automotrices sentadas en la misma mesa para corregir todas estas cuestiones”, plantea Bengolea, quien recomienda “prestar atención a los gastos administrativos, tener un muy buen colchón de cuotas para embarcarse en el plan de ahorro y estar atento con los primeros pagos”.
“Muchas veces los vendedores dicen que las cuotas iniciales son muy baratas, pero no te explican que te están cobrando la mitad. Eso se llama diferimiento. Una vez finalizado ese período, empezarán a cobrar el 100% más un adicional para recuperar lo que no se cobró antes. Ese es uno de los principales engaños”, resume.
Según datos oficiales, desde agosto de 2022 hasta abril de este año se registraron 5.703 denuncias sobre problemas en planes de ahorro previo para fines determinados.
Al margen de esas cuestiones, Damián Di Pace, analista de la consultora Focus Market, cuenta a Popular si conviene elegir un plan de ahorro en medio de la dinámica inflacionaria y el cepo importador. “Posiblemente, el próximo gobierno tenga que ajustar el tipo de cambio oficial, que es por el cual se mueve el valor del auto, por lo cual efectivamente va a crecer y evolucionar mucho el valor de la cuota. En las actuales condiciones, me parece que está bueno comprar un cero kilómetro, porque cuando se sincere el tipo de cambio, el auto valdrá más”, evalúa el especialista.
Y concluye: “Pero no lo haría con el plan de ahorro que da la propia concesionaria, sino vendiendo mi usado y observando cómo me puedo financiar en el mercado a una tasa más baja, que va a estar por debajo de la devaluación futura. Eso sería un mecanismo correcto”.