Las casas, construidas en el barrio Querini, fueron reactivadas y concluidas por la actual gestión provincial y nacional, tras ser paralizadas durante el gobierno de Mauricio Marcri. “En tres mandatos constitucionales llegaremos al récord de 75.000 soluciones habitacionales”, señaló el gobernador, quien además habilitó la obra de infraestructura escolar en la escuela “General Antonio Dónovan”.
En Fontana, el gobernador Jorge Capitanich, junto a la intendenta Patricia Rodas, hizo entrega este jueves de 51 viviendas a familias del barrio Querini, en el marco de un plan de reactivación de obras que fueron paralizadas durante el gobierno de Macri. Además, inauguró la refacción integral de la EEP N°103 “General Antonio Dónovan”, realizada con fondos provinciales, que beneficiará a más de 1.700 alumnos de dicho establecimiento y de otros que utilizan dicho inmueble.
“Hoy logramos la dignidad de una vivienda, por lo tanto, el derecho a la vivienda digna, el derecho al trabajo, el derecho al ambiente sano, el derecho a la cultura y a la lectura, y esos derechos se van forjando a partir del esfuerzo colectivo de todas las comunidades”, ratificó Capitanich, en el marco de la entrega de llaves, que incluyó una biblioteca familiar del Programa Nacional “Libros y Casa” para cada hogar.
En ese contexto, y con la presencia del presidente del Instituto de Desarrollo Urbano y Vivienda (IPDUV), Diego Arévalo, el vocal Mariano Brahim; y el senador nacional, Antonio Rodas, el mandatario provincial confirmó que la meta en estos cuatro años de gestión es “finalizar 8.000 viviendas, de los cuales más de 2.000 son aquellas que estaban inconclusas efectivamente a diciembre del 2019 pero quedaron inconclusas en 2015”.
“Para mí es una gran satisfacción, después de tanto tiempo y de tanta espera, que ustedes puedan ser adjudicatarios felices de estas viviendas de muy buena calidad que permiten la felicidad de una familia”, insistió el gobernador, remarcando que “en tres mandatos constitucionales llegaremos a 75.000 soluciones habitacionales, un récord para la provincia”.
La terminación de las 51 viviendas a través del Programa Reconstruir de la Secretaría de Hábitat del Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación, representó una inversión total $171.486.122,79, se trata de unidades habitacionales que se encontraban paralizadas, en el barrio Querini. Todas ellas cuentan con 2 habitaciones, baño, cocina comedor y lavadero, inclusive, veredas perimetrales.
De este modo el Estado garantiza el acceso a la vivienda digna de 204 personas, pertenecientes a familias de escasos recursos, y pobladores originarios y rurales de la zona, posibilitando la integración del barrio a la trama urbana y mejorando la calidad de vida de los mismos, el rendimiento escolar de los menores, el rendimiento en el trabajo de los mayores, y mejores condiciones de descanso y reposo, erradicando el hacinamiento de las familias propiciando una convivencia armoniosa del grupo familiar.
A su turno, el titular de Vivienda, Diego Arévalo sostuvo: “Hoy tenemos 51 razones para celebrar y desde el IPDUV estamos orgullosos de que 51 familias puedan tener su casa propia”. En esa línea, remarcó el compromiso y el trabajo realizado por el municipio, el gobernador, y el senador Rodas, quien realizó las gestiones correspondientes para que los fondos permitan reactivar las obras paralizadas, “para que estos sueños se hagan realidad”, e instó a las familias beneficiarias a abonar las cuotas sociales correspondientes “para que más chaqueños cumplan el sueño de la casa propia”.
Por su parte, el senador Rodas celebró a las “viejas familias” del barrio Querini como “las felices poseedoras de estas casas”, destacando que esta entrega “era nuestro gran objetivo y nuestro gran desafío”, sostuvo. En ese sentido, enfatizó: “Ustedes son la prueba testigo de los compromisos que no son palabras, que son hechos, que son acciones, se concretan y se concretan bajo la tutela y bajo la administración del contador Jorge Milton Capitanich”, resaltando la voluntad y el compromiso del mandatario “para con los sectores que realmente necesitan”.
Una refacción histórica en un edificio de más de 70 años
Junto al ministro de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, Aldo Lineras, y la intendenta Rodas, Capitanich inauguró las obras de refacción de la E.E.P. N° 103 “Gral. Antonio Donovan”, que fueron financiadas por el MPEI, alcanzando una inversión total de $87.019.211,71. “La educación significa movilidad social ascendente, cuanto más educación, mejores empleos, mejor trabajo, mejor remuneración y mejor futuro. Ustedes hoy empiezan a construir ese futuro”, expresó el mandatario.
En el marco de la inauguración, que también contó con la presencia de la vicedirectora de la Institución, Graciela Montiel, y personal educativo, el Gobernador valoró el esfuerzo y vocación de los docentes, y la colaboración de las familias de los 1146 alumnos afirmando que “garantizan una gran inclusión social educativa”.
Dirigida por Claudia Pereyra, la institución de primera categoría, con jornada simple (turnos mañana y tarde) tiene un total de 42 secciones (de 1° a 7° grado), y una matrícula actual de 1146 estudiantes. También comparte edificio con la EPA N° 77 (turno nocturno, con una matrícula de 420 estudiantes) y, desde 2019, con la UES N° 1 del IES “Puerto Tirol”, con una matrícula de entre 180 y 210 estudiantes.
Se trata de un edificio quinquenal de 70 años de antigüedad resuelto en una sola planta, con aulas, SUM, área administrativa, sanitarios, sector de depósitos, etcétera; por ello, y teniendo en cuenta su gran antigüedad, los trabajos de carácter integral comprendieron sanitarios (demolición completa, reconstrucción de revestimientos, cañerías, mampostería en mal estado, colocación de aberturas faltantes, arreglo de las existentes y colocación de nuevas griferías); cocina (revestimiento completo de paredes, limpieza de cañerías, nuevas aberturas y construcción de una casilla reglamentaria de gas); en veredas, nuevos solados; y en el patio interno del establecimiento, y un nuevo cerco.
En todo el edificio se reemplazaron carpinterías en donde se requerían y se completaron herrajes faltantes; se verificó toda la instalación eléctrica para su correcto funcionamiento y la reubicación del tanque de reserva con las bombas y depósito de máquinas; además, se pintó todo el establecimiento, y se colocó un nuevo mástil.